De entre los logos que podrían convertirse en clásicos, Pepsi es de los aspirantes más aventajados por la exactitud de sus formas y peso.
Pepsi basa su éxito en la fuerza de su gama cromática que rompe el espacio convirtiéndose en protagonista.
Pepsi es una perfecta muestra de cómo un logotipo se convierte en imagen inconfundible de su marca.
Pepsi cohesiona a la perfección la imagen de un logotipo moderno y a la vez tradicional convirtiéndolo en atemporal.
Se distingue por su extremado buen equilibrio, unido a originalidad y excelencia formal.