De entre los logos que podrían convertirse en clásicos, Gustavsberg es de los aspirantes más aventajados por la exactitud de sus formas y peso.
Muestra ideal para ejemplificar las bases gráficas que sustentan un logotipo bien hecho.
Este logo combina las formas geométricas sin que ello le reste movilidad y ligereza, el resultado es elegante pero fresco.
Gustavsberg basa su éxito en la fuerza de su gama cromática que rompe el espacio convirtiéndose en protagonista.
Gustavsberg cohesiona a la perfección la imagen de un logotipo moderno y a la vez tradicional convirtiéndolo en atemporal.
La belleza de este logotipo se basa en la justa importancia de sus vacíos dentro del cuerpo de la forma.
Gustavsberg es una perfecta muestra de cómo un logotipo se convierte en imagen inconfundible de su marca.
El logo Gustavsberg está ejecutado con tanta precisión que no resultará jamás un problema colocarlo.
Excelente logo equilibrado pero contundente de línea clara.