Selva basa su éxito en la fuerza de su gama cromática que rompe el espacio convirtiéndose en protagonista.
Selva cohesiona a la perfección la imagen de un logotipo moderno y a la vez tradicional convirtiéndolo en atemporal.
Este logo combina las formas geométricas sin que ello le reste movilidad y ligereza, el resultado es elegante pero fresco.